La camiseta es un elemento básico en el armario de todo hombre. Su versatilidad y relativa asequibilidad hacen que se puedan llevar de innumerables maneras en casi cualquier situación… excepto, quizá, en el código de vestimenta de un cóctel.
Dicho esto, las reglas para llevar camisetas son bastante sencillas. Empieza con los colores básicos, como el blanco, el negro, el gris y el azul marino, y podrás combinarlas con casi todo, desde chaquetas hasta prendas de punto, pasando por americanas y camisas con cuello.
Una vez que lo hayas conseguido, puedes empezar a jugar con los estampados, los dibujos, los detalles y los materiales para conseguir un look personal.
Aquí tienes la guía definitiva sobre cómo llevar camisetas con estilo.
Considera las camisetas de algodón tu mejor amigo durante las estaciones más cálidas. Son versátiles, duraderas y pueden combinarse con multitud de prendas, a la vez que te mantienen cómodo.
La única regla para las camisetas de algodón es conocer la ocasión. Para los looks elegantes e informales, evita las camisetas de algodón estampadas, ya que es probable que lleves una chaqueta informal por encima.
Más allá de eso, es otra combinación de vaqueros y camiseta en la que puedes dar rienda suelta a tu imaginación. Una camiseta blanca de algodón sobre vaqueros negros es un clásico ganador.
Las camisetas lisas son la prenda básica más fácil de llevar para los hombres. Como ya hemos dicho, son camisetas de colores sólidos que combinan bien con casi todo.
Por sí solas, pueden resultar muy elegantes durante las estaciones más cálidas. Sin embargo, si te las pones en capas durante los días más fríos, tendrás toda una nueva dimensión de vestuario con la que jugar.
Si no estás seguro de cómo combinar tu camiseta, opta primero por el blanco y combínala con unos vaqueros azules, negros o lavados a la piedra. Es casual y fresco y ese es el look exacto que buscas.
También puedes combinarlas con cazadoras bomber, chaquetas vaqueras o chaquetas de punto, según te convenga.
Las camisetas lisas también pueden combinarse con multitud de zapatos, desde zapatillas de deporte informales hasta botas de cuero y todo lo demás.
Las zapatillas de deporte pueden funcionar aquí, pero solo si te gusta el look atlético. Eso sí, asegúrate de que sean bien ajustadas y no holgadas.
Las camisetas estampadas siguen las mismas reglas que las lisas, pero suponen un paso adelante para dar un poco más de carácter a tu look. Ya sea un diseño gráfico, una marca o unas palabras de sabiduría, la única regla es ser sutil.
Atrás quedaron los días de las marcas exageradas de principios de la década de 2000, hoy en día las camisetas estampadas están diseñadas para realzar el aspecto general de un hombre, no para dominarlo.
Si llevas unos pantalones chillones como Jared Leto, combínalos con una camiseta de color sólido con un sutil estampado a juego.
Los vaqueros son otra opción para combinar con camisetas estampadas en la mayoría de las situaciones. Pueden funcionar tanto en un tono similar (gris sobre azul) como en contraste (blanco sobre azul).
¿No son las rayas lo mismo que las camisetas estampadas? Efectivamente, pero su forma geométrica las sitúa en otra clase de la que merece la pena hablar.
Conocidas oficialmente como camiseta bretona, las camisetas de rayas se han hecho populares entre los hombres más estilosos del mundo. Dado su estampado, la regla fundamental es combinar siempre las camisetas de rayas con prendas inferiores de color sólido. Es decir, vaqueros negros, azules, chinos sin estampado o pantalones lisos.
La razón está en las líneas: nunca quieres que las líneas choquen en tu look. Imagínate a alguien con una camiseta de rayas que lleva un pantalón de rayas. Parecerá un estafador fugado.
Otro punto que merece la pena mencionar son las rayas verticales. Aléjate de ellas a no ser que tengas el físico favorecedor de un culturista, ya que las líneas verticales contornearán tu cuerpo. No es bueno si tienes una silueta poco definida.
Cuando los días se vuelven más fríos, las mangas se alargan. Eso no significa que tengas que dejar de lado la camiseta por completo.
El ajuste es primordial con las camisetas de manga larga debido al material extra con el que se trabaja. Si te equivocas, pueden parecer pijamas.
La regla básica de los colores que hemos mencionado se aplica aquí con el blanco, los grises, los negros y los tonos marinos.
Los que buscan un poco más de atención pueden optar por una camiseta de manga larga a rayas. Nosotros evitaríamos los estampados en las camisetas de manga larga y optaríamos por las texturas y los materiales (lino o cachemira) para darle más carácter.
